Anular los errores

Queridas amigas, queridos amigos,

La tarde revuelta, con momentos de viento fuerte y cielo encapotado, dio paso a una noche de perfecta serenidad. Al despedir el día, la encontré inesperadamente extendiéndose por la huerta, entre los frutales, colmando el cielo. La luna, casi llena, aparecía estática entre tenues cintas de nubes blancas; su luz amarillenta difuminada por los sedosos adornos que la recorrían transversales. La serenidad formaba el mismo aire tibio, la suave calidez de esta noche que anticipaba el otoño.

Contemplar la quietud impregnaba de calma y dicha interior; más allá de la ausencia de conflictos, hacía brotar gratitud.

Batallas y paz; esfuerzo y serena recompensa; esta es una expresión de la dualidad. Inevitablemente se suceden en la vida mientras transcurra en el mundo donde la relatividad impera. Mientras no demos el paso que nos funda en el Absoluto, tenemos que saber que será así. Es el “Principio de acción y reacción” que rige el universo.

Pero, qué alegría que se rija de esta forma, que exista esta ley —la Ley del karma, en las antiguas enseñanzas de la India— que devuelve a ti cuanto haces.

Imagina que has cometido un error, ¿qué sería lo más deseable para ti ante tal contingencia? ¿Lo más deseable no sería borrarlo? ¿Qué pensarías si tuvieras la oportunidad de que ocurriera de esa forma? ¡Piénsalo, porque tienes esa oportunidad!

¡Qué maravillosa descarga de pesos, saber que podrás barrer cualquier equivocación! Si has actuado erradamente, el universo te presentará una situación que te permita actuar ahora de la forma correcta y contrarrestar el error, anularlo.

Así pues, cuando una dificultad se encrespe en el mar de tu vida, analízala para tratar de descubrir si puede ser consecuencia de una acción pasada —recientemente o a más largo plazo. ¿Quizá es una deuda “kármica” que se presenta para que la canceles? Si lo es, agradece que se presente y haz el esfuerzo de cambiar, esta vez, tu respuesta a la situación. Sí, en ocasiones el esfuerzo será tremendo y no te sentirás con fuerza para realizarlo. Entonces cierra los ojos, dirige tu atención al interior y siente: ¡qué gran regalo, la oportunidad de saldar nuestras deudas!

Sucederá también que en los momentos en que arrecien las dificultades, la Ley del karma puede ser lo último que tengas presente; lo que se impondrá será la falta de comprensión: “¿Por qué?”. Cuando esta aparezca, detente un instante, haz repaso, ¿el universo está trayéndote las circunstancias que te permitirán superar un error? No te olvides de la Ley del karma; no olvides que los escollos de la vida se presentan para alcanzar la libertad.

Después de una tarde turbulenta, la quietud. Con frecuencia no es fácil de alcanzar, pero el universo nos ha dado la incomparable ley que nos permite cancelar nuestras deudas. ¿Podríamos pedir algo más deseable ante un error, que ser capaces de hacerlo desaparecer?

Desde el alma, libre de la Ley del karma,

Indrani

«Cartas desde el camino. Pasos de una discípula de Yogananda» de Indrani Cerdeira